ORDEN REAL DEL REINO DE LO CÓMICO

CÉDULA REAL NÚMERO 0 (Errata, por favor léase NÚMERO 1 y disculpen la molestia de leer dos números).

JOVIALISTE 1º,

ASÍ ES, O NO ES, A TODOS POR IGUAL, Y EN CASO CONTRARIO, A NADIE DESIGUAL.

YO, JOVIALISTE 1º, no salido de un manicomio sino de varios, en medio de vuestra cordura, por la gracia divina del Altísimo que así no lo ha querido durante los últimos miles de años, hoy en este ignoto histórico día asumo el trono del país de lo cómico.

Y DECLARO, URBI ET ORBI, que nuestra nación está plagada de una maleza de chistes muy malos y extraordinariamente groseros que sumergen culturalmente a los puebloS, y que disfrutamos en privado.

LO HAGO EN MI INCONDICIONAL RANGO DE ALTEZA, que me ha sido otorgado para dominar su territorio extenso e indómito, en el que sin embargo se rié en todos los idiomas incluído el esperanto, y en donde el Sol alegra los corazones tanto en el este como en el oeste, en el sur como en el norte boreal, excepto en días de nublados, de lluvias y de chaparrones.

Y COMUNICO A TODOS MIS SÚBDITOS, y a los que no lo sean, que hasta el día de ayer lo cómico se resistió con seriedad a todos mis intentos de absurdo dominio por mi eterna ausencia de sentido del humor, por mi conocido pesimismo, y por mi tristeza abrumadora, pues todos encontraban mis chistes angustiantes o bastantes soporíferos e insoportables.

PERO A PESAR DE ESA OPOSICIÓN NEGATIVA INMOTIVADA , a partir de la fecha SOY Y SERÉ el Primer, Único, y Último Monarca del Reino o lo que sea.

QUE NADIE SE RÍA, ni menos llore de alegría, pero desde ya COMUNICO QUE:

AL TÉRMINO DE MI REINADO repartiré el mísero don recibido en partes iguales entre todos mis vasallos, y a ellos qué.

POR LO DICHO, o por cualquier otra cosa, a todos mis queridos y alegres súbditos digo que no se me ocurre nada más, y agrego, para que por lo menos les quede algo en claro, si lo anterior resultara sumamente confuso:

1º) Que conforme con las leyes de la buena vida y con las de la comicidad se entretengan, se diviertan y que no se olviden de reirse a diario de mi persona o de ellos mismos, y en sus o en mis propias barbas, obviamente cuando nos crezcan, excepto a los ya barbudos y a la mujer barbuda del circo;

2º) Este 2º ya lo voy a pensar en algo más de tiempo, pues VASALLOS, no me apuren que un segundo es muy poco;

3º) Continuaré con este Mandato Real próximamente,al volver desplumado de mi viaje de incógnito al casino de Montecarlo, lo que hago saber a todos para que nadie LO ignore, especialmente los medios QUE SE ENCARGARÁN DE DIFUNDIRLO EN TODOS LOS NOTICIOSOS.

4º) Conózcase, Ignórese, y Tírese al cesto, no a esta Cédula Real sino al vil vasallo que la desconozca o que con total falta de sentido común la obedezca. No quiero más cretinos que yo mismo en el reino.

Jovialiste 1º, Rey del País de lo cómico.

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